Castilla-La Mancha sigue la tendencia nacional del retraso de la maternidad. Según los últimos datos, cuatro de cada diez mujeres tienen su primer hijo a partir de los 35 años, una cifra que refleja un crecimiento de casi el 5% respecto a hace una década.
Esta maternidad tardía se ha convertido en una realidad cada vez más común en la región. Factores como la inestabilidad laboral, las dificultades para acceder a una vivienda y la falta de medidas eficaces para la conciliación familiar y laboral son algunas de las principales causas señaladas por los expertos.
A este escenario se suma un nuevo dato preocupante: la natalidad ha caído de forma notable en el primer trimestre de 2025, situándose como la tercera cifra más baja desde 2013. Este descenso continúa alimentando el debate sobre las políticas de apoyo a las familias y la necesidad urgente de medidas que faciliten la maternidad en edades más tempranas.
