La memoria de un barrio se construye a través de sus vivencias, sus calles y, sobre todo, de las personas que lo habitaron. En esta ocasión, Pilar Camacho Carrasco nos ha enviado una fotografía cargada de historia y emociones. Una imagen en blanco y negro que nos transporta a la escuela de La Chula, ubicada frente a la casa de Alfonso Meden, en el barrio Casqueral de Socuéllamos.

En la imagen, tomada hace más de siete décadas, se puede ver a una numerosa clase de niños y niñas acompañados por su maestra, que, según recuerda Pilar, podría haber sido Juliana. Con solo dos años en el momento en que se capturó esta instantánea, Pilar hoy, a sus 73 años, reconoce a casi todos los que aparecen en la imagen, aunque lamenta que algunos de ellos ya no están.

Entre los nombres que resurgen del recuerdo, encontramos a los Camparea, Valentín Huedo, Las Quemás, que vivían en la calle Villarrobledo, Marina, el Afilador, Pepe Plaza, Octavio Molina, Amador, Carmen «la Campana!, así como Eduardo Varea y su hermana Custodia Varea, Agustín y su hermana María Antonia. También figura en la fotografía su propio hermano, Paco Camacho.

Esta imagen no solo es un testimonio del sistema educativo de la época, sino también de la formación conformaba el barrio Casqueral. Los niños y niñas de entonces compartían pupitres, juegos y vivencias en una escuela que fue testigo de su infancia. Hoy, esta fotografía se convierte en un valioso documento gráfico que ayuda a preservar la memoria de Socuéllamos y su gente.

A pesar de desconocer el autor de la imagen, su valor histórico y sentimental es incalculable. Agradecemos a Pilar Camacho por compartir este hermoso recuerdo.