En una época donde la música en directo era el alma de las fiestas y celebraciones, un grupo local dejó su huella en la historia musical de Socuéllamos. Se hacían llamar «Fuego Eterno», y su energía y talento convirtieron cada presentación en un espectáculo inolvidable.
Fotografía datada en 1970, donde estos jóvenes músicos ofrecieron una actuación en una boda que aún permanece en la memoria de quienes la vivieron. La fotografía que acompaña este reportaje nos traslada a aquel momento mágico, donde el ritmo del rock y el sonido de los instrumentos llenaban el ambiente de una celebración única.
Los integrantes de «Fuego Eterno»
El grupo estaba formado por:
- César (guitarra rítmica), con su presencia segura en el escenario.
- Félix (saxofón), aportando un toque melódico y vibrante.
- Pepe López Alcolea (voz), quien con su estilo y voz potente lideraba el espectáculo.
- Antonio Pozuelo (batería), marcando el ritmo con precisión y energía.
- Isidoro Gómez (bajo), completando la armonía con su característico sonido grave.
Un legado musical en Socuéllamos
En aquellos años, la música en vivo era el centro de la vida social. Las orquestas y grupos locales no solo animaban bodas y fiestas populares, sino que también eran el reflejo de una generación apasionada por la música y la expresión artística.
«Fuego Eterno» fue parte de ese movimiento, ofreciendo actuaciones llenas de vitalidad y dejando un recuerdo imborrable en la memoria colectiva del pueblo. Su historia es un testimonio de la importancia de la música en la vida cultural de Socuéllamos y un recordatorio de aquellos días en los que el sonido de las guitarras y el saxofón marcaban el ritmo de la diversión.
Hoy toca recordar a «Fuego Eterno», rendirles homenaje a un grupo de jóvenes que con su talento y entusiasmo encendieron escenarios, dejando una marca que nosotros queremos recordar dentro de la historia musical local.
Desconocemos el autor de la fotografía.










