Tras varios días de intenso calor con temperaturas propias del verano, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) anuncia un cambio brusco en el tiempo a partir del próximo domingo, 21 de septiembre, que marcará un punto de inflexión en esta recta final de la estación estival.
Según las previsiones, la localidad pasará de los actuales valores máximos en torno a los 36 y 37 grados registrados estos días, a unas máximas que rondarán apenas los 28 grados el domingo, acompañadas además de una probabilidad de precipitaciones del 65 %. El descenso térmico se acentuará la próxima semana, cuando los termómetros podrían situarse entre los 22 y 23 grados de máxima y mínimas en torno a los 8 grados, obligando a rescatar prendas de abrigo tras semanas de calor sofocante.
Este giro meteorológico supondrá, en palabras de los técnicos, “los últimos estertores del verano”, ya que no se prevé una recuperación significativa de las temperaturas en los días posteriores.
En definitiva, Socuéllamos pasará en apenas unas jornadas de convivir con los rigores propios del verano a un ambiente mucho más fresco, preludio del otoño que está a punto de comenzar.
